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Niño Interior

Niño Interior

¿Quién es el Niño Interior?


El niño interior es la representación de nuestra inocencia, nuestro potencial y todo lo que se interponga en su camino.  Tiene el espectro de lo más divino dentro de nosotros así como los más heridos. Nos muestra lo que podemos llegar a ser y los aspectos que debemos sanar para llegar allí.  Es la parte de nosotros que canta una versión animada de nuestra canción favorita cuando estamos conduciendo por la autopista. Él es la voz interior en nuestra cabeza que dice: "Yo puedo hacer eso", cuando creemos que no podemos.
Tu niño interior es el chico dentro a quien se grita y ridiculiza por hacer pipí en la cama. El chico que se burla sin descanso en la escuela y siempre fue el último en ser recogido en la clase de gimnasia. Él podría ser el niño que fue abusado sexualmente por un miembro de la familia o la niña que tenía un padre con mano dura.
Es parte de nuestra psique que permanece en silencio acurrucado en un rincón de nuestra mente hasta que alguien o algún evento desencadena el dolor y la angustia inolvidable. Para muchos de nosotros las cuestiones sin resolver de la infancia pueden ser patrones débiles de adultos. La reacción del niño interior herido en la rodilla disparada automática por factores desencadenantes presente totalmente en la edad adulta pueden sabotear los esfuerzos que hacemos hacia el éxito o el crecimiento.
Se nos dice "superarlo"," suéltalo", pero, si el Niño Interior se deja sin ser escuchado, el sabotaje es inevitable. Nos sentamos en la terapia por años hablando sobre lo horrible que fue o lo ignoramos y nos consume el resentimiento. Obsesionado con e ignorando el pasado no nos sirve. Nos mantiene como rehenes.
El Niño Interior necesita ser sanado. Necesita el amor y la compasión de un adulto. Ese adulto eres tú. Eres el único que puede entrar y curar al niño de tu pasado y traerlo a tu corazón.
Cuán difícil para un padre o maestro tratar a un niño desde su propio niño interior inmaduro, se pierde la paz, amor, compresión necesaria en el momento de formar y modelar a nuestros hijos o alumnos.  Ese niño exterior termina siendo espejo de ese niño interior.  En la cabeza de ese adulto se encuentra emociones  no atendidas de un niño que reclama atención, cuan más difícil aun que el niño interior permita darle a otros lo que el mismo reclama,
El amor pensado de un adulto no alivia la carencia de un amor del corazón, el amor se siente no se piensa pero el adulto está en el centro de sus pensamientos y el niño vive desde el centro de sus emociones, hemisferio derecho. El adulto desde su niño interior con sus desequilibrios emocionales o energéticos solo genera ansiedad en quienes le rodean, como si estuviéramos electrificados.  Sanar las heridas de tu niño interior te alinea con la Fuente, Dios, el Universo. La homeostasis es restaurada. Podemos seguir adelante para lograr nuestros sueños y vivir en la alegría y la paz. Nuestros niños (incluyendo nuestro niño interior) e hijos lo merecen y hoy su conducta alguna veces mal interpretada es simplemente un reclamo de amor incondicional.

                                                                                                 José A Goyo Rivero
                                                                                                    EFT-CERFT-N1
                                                                                                       PNL Master
                                                                                           Especialista en emociones




Nota: Para terapias para el alivio emocional del niño interior -Alivio de dolencias físicas, cura de conflictos emocionales, mejora en enfermedades graves. Alivio de Stress, miedo, angustias, depresión, duelo, fobias. Mejora en problemas de conducta y aprendizaje, ...Problemas de parejas y familiares-
Conferencias y charlas sobre emociones- Jornadas sobre la vida emocional del niño
Conciencia responsable de la paternidad- La responsabilidad de ser padre

Informacion: Tel: 58412-5638870
E-Mail: esencialmentehumano@gmail.com
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Enseñanza de Isabelle Filliozat

Enseñanza de Isabelle Filliozat

En el colegio se aprende historia, geografía, matemáticas, lengua, di­bujo, gimnasia... Pero ¿qué se aprende con respecto a la afectividad? Nada. Absolutamente nada sobre cómo intervenir cuando se desencade­na un conflicto. Absolutamente nada sobre el duelo, el control del miedo o la sana expresión de la cólera.

El noventa por ciento de nuestra vida cotidiana se silencia. Pero ¿no nos resultaría tan útil recibir algunas nociones sobre la conciencia de uno mismo y la descodificación de las emociones como saberse la lista de los reyes que han ocupado el trono en nuestro país?

Hace quince años empecé a dar clases en la Escuela Nacional de Artes y Oficios. Me correspondió un módulo titulado «Emociones». Mu­chos de los fracasos en el examen de fin de carrera se podían achacar a la emotividad. Había que enseñar a los futuros ingenieros a controlar los nervios, a dominar el movimiento corporal a la hora de hablar en públi­co, a expresar con palabras sus emociones y a poner emoción en sus ex­posiciones, y a tener confianza en sí mismos.

Para lograrlo no basta el C.I. (cociente intelectual). Es lo que vemos

todos los días, tanto en el ámbito de la enseñanza como en el de la em­presa; lo que marca la diferencia no son únicamente los conocimientos técnicos, sino la capacidad para manejar los afectos y comunicarse.

La comunicación tiene sus leyes: hay que adquirir ciertos conoci­mientos, dominar distintas formas de enfocar los asuntos, desarrollar di­ferentes modos de desenvolverse. El lenguaje de las emociones tiene una gramática. Dirigir una reunión, hablar en público, vencer la timidez, res­ponder a la agresividad, imponerse, dar la propia opinión, escuchar, comprender las reacciones de los demás, llorar, motivar a un equipo y motivarse a uno mismo, ser receptivo a las emociones, hacer frente a la adversidad y al cambio, resolver conflictos...,

Continua.........