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Ahogándonos en la Energía por Jennifer Hoffman 

Si pudiéramos ver la energía de la tierra tal como existe realmente, veríamos muchos puntos de luz brillante rodeados por espacio vacío. Las luces brillantes representan la energía que está esperando para convertirse en forma; los espacios vacíos crean lugar para que la energía se expanda en respuesta a las órdenes que recibe. Pero lo más impactante para nosotros sería saber que esta energía, literalmente, está pendiente de cada palabra y pensamiento nuestro, esperando que nosotros la comandemos a la presencia física. Pero muy a menudo nos sentimos abrumados por la energía y nos ahogamos en ella, en lugar de estar en control. Pensamos que ella está en control y ni siquiera consideramos que nosotros tengamos dominio sobre la energía de la tierra. La energía que experimentamos representa las vibraciones colectivas de todos quienes nos rodean. Y nuestra primera experiencia de esto es emocional, por lo que podemos sentirnos tan abrumados y fuera de control. ¿Estamos alguna vez en control de nuestras emociones? Lo estamos cuando somos conscientes de ellas y establecemos nuestra intención para lo que queremos experimentar. Pero por lo general estamos tan involucrados en las emociones que ellas nos abruman y entonces empezamos a ahogarnos, tan enfocados en mantener la cabeza fuera del agua que ni siquiera podemos empezar a pensar en el manejo de la energía. Una de nuestras mayores lecciones de vida por aprender es que la vida se trata de elecciones y que es a través de la elección y de elegir conscientemente que establecemos la energía de nuestra vida. Es por eso que tenemos libre albedrío, aunque tendemos a utilizarlo de maneras inconscientes. Nosotros no estamos aquí para sufrir, aunque ésa es una opción posible, así como la alegría. Nos olvidamos de que estamos aquí como maestros, no como víctimas, y podemos ser abrumados por la energía y ahogarnos en ella, o ser conscientes de que estamos creando a cada momento y utilizar nuestro libre albedrío para dirigir la energía a su expresión más alta posible. Nada en nuestras vidas está predeterminado y todo depende de nosotros y refleja las elecciones que hacemos. Cuanto antes seamos conscientes de nosotros mismos como poderosos maestros de la energía de tercera dimensión, más pronto podemos empezar a crear la realidad y el mundo en el que queremos vivir. El uso consciente e intencional de nuestro libre albedrío es lo que nos permitirá crear este resultado y hasta que lo hagamos, estaremos ahogándonos en la vasta energía que nos rodea, confundidos, inseguros y preguntándonos por qué nuestras vidas son tan desafiantes, cuando con un simple pensamiento podemos dirigir la energía en formas más edificantes y satisfactorias, y utilizar el potencial ilimitado de la energía que nos rodea para crear una vida que pensábamos que sólo existía en nuestros sueños.

Copyright (C) 2004-2011 por Jennifer Hoffman

Lo Cuantico

La elusiva realidad cuántica

JORDI PIGEM

Niels Bohr estaba convencido de que quienes no se escandalizan al oír hablar de física cuántica no la han entendido. La física cuántica tiene el privilegio de ser a la vez la disciplina científica más compleja a nivel matemático, la más paradójica a nivel filosófico y la más carismática a nivel popular. Tras más de ochenta años, persiste el debate sobre qué significa y qué tipo de realidad nos muestra. Y da pie a multitud de publicaciones, del ensayo filosófico a la narrativa de ficción

 

En las primeras tres décadas del siglo pasado nació la física cuántica. Hoy no hay disciplina científica que sea tan matemáticamente compleja y tan filosóficamente estimulante, de la que se hable tanto y se hagan interpretaciones tan dispares. No sorprende su carisma. Por un lado, la física cuántica promete darnos respuesta definitiva a una de las cuestiones clave que a través de los siglos han guiado la historia del pensamiento: ¿cuál es la naturaleza última de la realidad? ¿En qué consiste en último término el mundo? Por otra parte, la física cuántica pone en tela de juicio buena parte de los presupuestos y convicciones que nos guían cotidianamente.


El progreso científico, hasta ayer, siempre había generado mayor certeza sobre la realidad. Aquí ya no: las antiguas certezas se disuelven en un océano de probabilidades y entidades intangibles (como en la economía de nuestros días). “Fue como si el suelo que nos sostenía se hubiese esfumado y, en ausencia de todo fundamento sólido, nada pudiera erigirse”, dijo Einstein del nacimiento y desarrollo de la física cuántica, a la que él mismo contribuyó decisivamente. Pero el físico que lideró la aventura de adentrarse en el mundo cuántico no fue Einstein sino Niels Bohr, el danés en honor del cual se bautizó como interpretación de Copenhague a la que fue, durante más de medio siglo, la brújula más habitual para intentar orientarse en estos laberintos. Hay más de media docena de interpretaciones posibles de la física cuántica: todas operativas en sus respectivos ámbitos, pero ninguna permite elaborar una visión del mundo plenamente coherente. En un simposio de físicos en Cambridge en 1999 se pidió a los participantes que votaran por su interpretación favorita: de los 90 que contestaron, 4 seguían favoreciendo la interpretación de Copenhague, 30 trabajaban a partir de la hipótesis de que existen universos múltiples, y 50, más de la mitad… no supieron qué contestar. La verdad es que la mayoría de físicos se concentran en el día a día del cálculo o del laboratorio y no dan demasiadas vueltas a las paradojas que emergen a su alrededor. Pero las paradojas están ahí y cuestionan radicalmente nuestra percepción habitual de la realidad.


Los átomos y la cultura

El propio Bohr afirmaba: “Estoy convencido de que quienes al oír hablar por primera vez de física cuántica no se escandalizan es que no la han entendido”. Hay para escandalizarse, porque la realidad no parece ser para nada lo que desde Platón y Descartes andábamos buscando. Una de las claves de la ciencia moderna es la búsqueda de elementos fijos e indivisibles que, al combinarse, darán lugar a la multitud de seres que encontramos en nuestra experiencia. Demócrito (sobre quien Marx escribió su tesis doctoral), en la Grecia clásica (a la que tanto crédito dio Europa durante siglos), creyó que la realidad estaba formada por átomos, es decir, partículas indivisibles (en griego tomos es una rebanada o porción). Pero a principios del siglo XX se descubrió que los átomos no son ni sólidos ni indivisibles. Ello tuvo repercusiones en toda la cultura. Kandinski lo vivió como una catástrofe: “El colapso del modelo del átomo fue equivalente en mi espíritu al colapso del mundo entero... No me hubiera sorprendido que apareciera una piedra flotando en el aire ante mí, que se fundiera y se volviera invisible”. En 1911, el modelo atómico de Rutherford propuso la conocida estructura de electrones alrededor de un núcleo central. Luego se descubrió que los protones y neutrones que componen el núcleo resultan a su vez de complicadas combinaciones de otras partículas menores, como los quarks (término que el físico y lingüista Murray Gell-Man sacó del Finnegans Wake de Joyce: “Three quarks for Muster Mark!”). Las partículas elementales, lejos de ser cada vez más elementales, son cada vez más numerosas y complejas: el listado de su nomenclatura y propiedades ocupa docenas y docenas de páginas en el folleto (booklet) más utilizado, que se edita en Berkeley y va creciendo con los años.


El electrón puede hallarse en un lugar del átomo y reaparecer en otro, como por arte de magia: “No existe tal cosa como una partícula con un camino bien definido”, sentenciaba Bohr, quien añadía que “las partículas materiales aisladas son abstracciones: sus propiedades sólo se pueden definir y observar en su interacción con otros sistemas”. Con todo ello no sólo se esfuma la idea de que hay elementos últimos que componen la realidad, sino que se pone en cuestión que exista una realidad objetiva, previa e independiente del observador. Einstein repitió durante décadas su eslogan “Dios no juega a los dados”. Así, en una carta de 1944 escribe a Max Born: “Usted cree en un Dios que juega a los dados y yo en una ley y un orden completos en un mundo que existe objetivamente”. El verdadero problema de Einstein (así lo muestra Manjit Kumar en Quantum) no era que en el mundo cuántico las certezas se vean suplantadas por meras probabilidades, sino la pérdida de esa realidad objetiva e independiente.


Según Einstein, “es básico, para la física, que uno crea en un mundo real que existe independientemente de cualquier acto de percepción”. Einstein creía firmemente en una realidad objetiva, independiente del observador. Al fin y al cabo, Platón y Aristóteles, Galileo y Descartes, Newton y Kant, todas las grandes lumbreras europeas se habían acercado de ese modo a la realidad. Kant, por ejemplo, pensaba que detrás de los fenómenos observados yace una realidad objetiva a la que no podemos acceder. En cambio Goethe, una generación más joven que Kant, ya afirmaba: “No busquéis nada detrás de los fenómenos: ellos mismos son la teoría”. En la física cuántica, detrás de los fenómenos no hay nada: “no hay fenómeno que sea fenómeno si no es un fenómeno observado”, afirmaba Niels Bohr y reafirmaba John Wheeler, el físico que dio nombre a los agujeros negros.


Todo ello nos lleva más allá del realismo clásico, hacia una realidad posmaterialista y un universo participativo, en el que no estamos separados del mundo y en el que las decisiones y expectativas del observador condicionan lo observado decisivamente. Wheeler también creía que las revoluciones relativista y cuántica pronto deberán ser completadas con una revolución más radical. En nuestro contexto de crisis sistémica, la física teórica, la ciencia que más se acerca al núcleo de la realidad, pide también un cambio de perspectiva.

EL DESDOBLAMIENTO DEL TIEMPO

EL DESDOBLAMIENTO DEL TIEMPO

EL DESDOBLAMIENTO DEL TIEMPO, JEAN-PIERRE GARNIER MALET

 Entrevista a Jean-Pierre Garnier Malet, creador de la teoría del desdoblamiento del tiempo, publicada en La Vanguardia.

 - Tengo 70 años. Vivo en París. Casado, 2 hijos y 3 nietos. Soy doctor en Física, mi especialidad es la mecánica de los fluidos. La política debe sustentarse en la tolerancia. Tengo la certeza de que hay que pensar en los demás como nos gustaría que los demás pensaran en nosotros. - Su teoría ¿está avalada por la ciencia? - La respetada revista American Institute of Physics de Nueva York y su comité científico la han validado publicándola en el 2006 porque es una teoría que ha permitido, primero, prever, y luego, explicar la llegada de planetoides al sistema solar.

 ¿Quiere que le explique para qué sirve la ley del desdoblamiento del tiempo?

- Sí, pero sencillito.

 - Tenemos dos tiempos diferentes al mismo tiempo: un segundo en un tiempo consciente y miles de millones de segundos en otro tiempo imperceptible en el que podemos hacer cosas cuya experiencia pasamos luego al tiempo consciente. - ¿Y todo eso sin enterarnos? - Exacto. Tengo una síntesis instantánea de un análisis que he realizado en otro tiempo aunque no tenga la memoria de ello.

- ¿Así funciona el tiempo?

- Sí, en cada instante presente tengo un tiempo imperceptible en el cual fabrico un futuro potencial, lo memorizo y en mi tiempo real lo realizo. - ¿? - Tenemos la sensación de percibir un tiempo continuo. Sin embargo, tal como demuestran los diagnósticos por imágenes, en nuestro cerebro se imprimen solamente imágenes intermitentes. Entre dos instantes perceptibles siempre hay un instante imperceptible.

- ¿Como en el cine, que sólo vemos 24 imágenes por segundo?

- Sí, la número 25 no la vemos, es subliminal. En publicidad se ha utilizado ese tipo de imágenes para influir con éxito en nuestro comportamiento, lo que ha mostrado que lo subliminal es accesible a nuestra memoria. El desdoblamiento del tiempo ha sido probado científicamente y la teoría ha dado justificaciones a escala de partículas y a escala de sistema solar.

- Tenía entendido que las leyes de la cuántica no se aplicaban a las cosas grandes.

- El fenómeno del desdoblamiento del tiempo nos da como resultado el hombre que vive en el tiempo real y en el cuántico, un tiempo imperceptible con varios estados potenciales: memoriza el mejor y se lo transmite al que vive en el tiempo real.

- ¿Nuestro otro yo cuántico crea nuestra realidad?

- Podríamos decir que entre el yo consciente y el yo cuántico se da un intercambio de información que nos permite anticipar el presente a través de la memoria del futuro. En física se llama hiperincursión y está perfectamente demostrada.

- ¿Estoy desdoblada como la partícula?

- Sí. Y sabemos que, si tenemos dos partículas desdobladas, ambas tienen la misma información al mismo tiempo, porque los intercambios de energía de información utilizan velocidades superiores a la velocidad de la luz. ¿Conoce el principio de los gemelos de Langevin?

- No. - En los años 20, Paul Langevin demostró que si un gemelo viajaba a la velocidad de la luz, envejecía menos que el que se quedaba quieto. A Langevin no le creyeron. Hubo que esperar 50 años: en 1970, gracias a los relojes atómicos, se comprobó esa ley.

- Entonces, en ese tiempo imperceptible pasó mucho tiempo.

- Exacto: si puedo viajar a velocidades prodigiosas, un microsegundo se convierte en un día entero. Cuando regreso, no sé si me he ido, puesto que he estado ausente un microsegundo.

 - Estupenda propiedad, ¿pero quién es el que viaja?, ¿yo?

 - Existe otra propiedad conocida en física: la dualidad de la materia; es decir, una partícula es a la vez corpuscular (cuerpo) y ondulatoria (energía). Somos a la vez cuerpo y energía, capaces de ir a buscar informaciones a velocidades ondulatorias. - ¿Y cómo asimilamos esa información?

- En el sueño paradoxal, cuando estamos más profundamente dormidos y tenemos nuestra máxima actividad cerebral, se da el intercambio entre el cuerpo energético y el corpuscular. Y es ese intercambio el que le permite arreglar el futuro que ha creado durante el día, lo que hace que al día siguiente su memoria esté transformada. - Vaya. - El intercambio se realiza a través del agua del cuerpo. Ese intercambio de información permanente es el que crea el instinto de supervivencia y la intuición. - ¿Fabricamos potenciales por medio de nuestro pensamiento?

- Así es. Si por ejemplo pienso en una catástrofe, ese potencial ya se inscribe en el futuro y puede sufrirla usted u otro. De manera que la conclusión es: “No pienses en hacer a los demás lo que no quisieras que los demás pensaran en hacerte a ti”. No es una ley moral ni filosófica, es una ley física. - Es difícil controlar el pensamiento.

- De día, mucho; pero justo antes de quedarnos dormidos tenemos un minuto, y basta con que durante ese minuto controlemos: esa es la manera de conectar con esa parte energética, llamémosla el doble, para pedirle que solucione los problemas. - ¿Es como una oración?

- No: es una relación, y hay que dejar totalmente las riendas al otro; las noches están para eso. La noche no sólo permite borrar potenciales no deseados, sino que también nos guía los pensamientos del día siguiente. - Asombroso. La teoría del desdoblamiento del tiempo permitió explicar la llegada de planetoides cerca de Plutón, pero Garnier va mucho más allá y nos cuenta que esa ley es aplicable a nuestra vida: “Tenemos un cuerpo muy bien hecho que nos permite proyectarnos en el porvenir: ir a ver el futuro, arreglarlo y volver para vivirlo. Y es durante la noche cuando tenemos la capacidad de arreglar ese futuro que hemos construido durante el día. Podemos ver los peligros antes de vivirlos por medio de la intuición, y borrarlos”. Algunas claves para comprender y aplicar la Teoría del Desdoblamiento

- Todos tenemos un doble. - Nuestro doble no es el cuerpo astral o etérico. Es verdaderamente nuestro “yo”, en otra dimensión. - Todo ocurre en el eterno ahora. - La información con nuestro doble se intercambia mediante aperturas entre los distintos tiempos. Estas “aperturas temporales” imperceptibles, son aceleradores del transcurso del tiempo que nos arrastran hacia otros espacios a velocidad prodigiosa. - Nuestro “doble” es verdaderamente otro “yo”. El cuerpo visible explora el espacio en nuestro tiempo. El otro, generalmente imperceptible, viaja en los diferentes tiempos de nuestro desdoblamiento. - De manera esquemática podemos decir que un cuerpo energético informa a nuestro cuerpo físico.

Toda partícula emite y recibe ondas. Todo organismo recibe informaciones para vivir y sobrevivir. - El presente actualiza futuros potenciales creados por el pasado. Un cambio de pensamiento de un segundo crea numerosos potenciales de equilibrio en un tiempo acelerado, cuya síntesis instantánea en nuestro tiempo, conllevaría una puesta en forma o recuperación rápida de apariencia milagrosa. - Nuestro “doble” experimenta muy rápidamente nuestro futuro y, por aperturas imperceptibles entre los dos tiempos, intercambios permanentes de informaciones nos llevan por el buen camino. - Es recuperando el principio vital de intercambio de informaciones con nuestro “doble” durante nuestros sueños, que podremos por fin conocer el objetivo de nuestra vida y encontrar el equilibrio capaz de reconducirnos a él. - Nuestro doble está a nuestro servicio, esperando contactar con nosotros para transmitirnos los mejores instintos de supervivencia, ya que él viaja al futuro y nos transmite la información.

- Tenemos varias potencialidades en nuestro futuro. Se trata de escoger la mejor para beneficio nuestro y de nuestro planeta, aprendiendo a recibir las informaciones de nuestro “doble” y no empezar a poner en duda su existencia. - No hay necesidad de recordar los sueños. Basta con prepararnos a “bien soñar” por la noche para vivir bien durante el día, modificando nuestros pensamientos (siempre en positivo). - Momentos antes de dormirnos podemos ponernos en contacto con nuestro “doble”, exponerle nuestros problemas y pedirle que busque la mejor solución posible (de entre los posibles futuros). ¿Recuerdan la frase “lo consultaré con la almohada”?

 - Tener total confianza en que tu “doble”, te lo va a resolver de la mejor manera posible (ya que tu doble eres tú en otra dimensión). Tener la “certeza” de que ya te lo resuelve. Tener una actitud de total despreocupación y confianza. No pensar en hacer a los demás lo que no quieras que los demás piensen en hacerte a tí. Estar muy atentos a las señales que nos da la vida. Saber escuchar los “avisos”. - Estas informaciones provenientes de las “aperturas temporales” imperceptibles nos permiten mejorar nuestro presente. Son siempre tan rápidas que nos llegan bajo la forma de intuiciones, sugerencias y premoniciones. - El control de las aperturas temporales cambia nuestras noches y también nuestra vida. Además es un medio muy eficaz para ya no estar angustiados o deprimidos frente a una situación delicada, a condición de saber cómo y por qué proceder.

En efecto, el saber que el día siguiente será mejor nos alegra el corazón, el estrés desaparece y con él las enfermedades. El dirigir nuestra vida es nuestra responsabilidad. - Es preciso ser dos para intercambiar información: uno de ellos viaja entre su presente y su futuro. El otro entre ese futuro (que es su presente) y el futuro de ese futuro (que es su propio futuro). Así pues, las tres realidades presentes -del pasado, del presente y del futuro- son accesibles al mismo tiempo por intercambios de información en las aperturas temporales. - Nuestro doble es un explorador o mensajero. Está ahí para asegurarnos el mejor presente a cada instante. Está listo para darnos todas las informaciones necesarias en cuanto se lo pidamos. Puesto que “él” es “yo”, está siempre dispuesto a crearnos el mejor porvenir. - Cuando estamos seguros de recibir ayuda en todo momento y en todo lugar, esta confianza se vuelve un automatismo saludable. - Nuestro doble tiene la capacidad de explorar lentamente nuestro futuro, en un tiempo tan rápido que no nos damos cuenta de ello. En nuestro tiempo recibimos sus consejos en forma de sugerencias inmediatas, que crean nuestra intuición.

- El hecho de estar desdoblados sin tener tiempo de darnos cuenta, nos da la sensación de saberlo todo intuitivamente, sin tener que pensar en nada. - Nuestro cuerpo es un receptáculo de informaciones necesarias que nuestro “doble” llena en cuanto puede. Todas nuestras células obedecen a la voluntad de este otro yo, que espera nuestro consentimiento para venir a visitarnos. - Su benevolencia es incuestionable porque “él” es “tú”, y siempre lo será puesto que te asegura la vida después de la muerte, en otro tiempo, pero como es imperceptible lo hemos olvidado. Es buscando y reencontrando el contacto con nuestro “doble” que podremos equilibrarnos y entender el objetivo de nuestra vida terrestre.

- ¿Cómo proyectamos nuestro futuro?

La anticipación es un principio vital. Es con nuestros pensamientos que proyectamos nuestro futuro. Si vamos por la calle y alguien nos da un empujón y pensamos ¡lo mataría!, este pensamiento ya está abriendo un futuro potencial asesino para nosotros en nuestras aperturas temporales. Esto lo podemos modificar con un sencillo intercambio de información: con un pensamiento contrario y tranquilizador. Así reina la paz en el futuro. La ley de los tiempos es sencilla: “Si nadie en la Tierra pensara en matar, no existiría ningún futuro potencial asesino y la actualización de un asesinato sería imposible”. Todo depende, pues, de nuestro modo de vida y de nuestros pensamientos que crean el conjunto de nuestras posibilidades de futuro y eso durante los aproximadamente veinticinco mil años de nuestro desdoblamiento actual. Nuestro doble puede modificar los futuros que nosotros hemos creado, siempre a petición nuestra.

Cuando le damos las gracias, él entiende que va por buen camino y no duda en seguir adelante con lo que ha empezado, en función de las informaciones que recibe de su pasado. - Restablecer un cuerpo enfermo o acallar una mente angustiada viene a ser cambiar el futuro y consecuentemente cambiar el mundo. El quejarse o lamentarse crea inmediatamente en el futuro algo del que poder quejarse o lamentarse. - El intercambio de informaciones con un doble no es mágico ni peligroso. Lo peligroso es ignorar la forma de controlar las informaciones que nos llegan a cada instante y de vivir según nuestra conciencia, sin saber quién la llena de pensamientos subliminales sin interés alguno. - La única dificultad proviene de la forma de pensar, pues no estamos acostumbrados a colocar el futuro antes que el presente.

Esta nueva noción del tiempo va a conmocionar el fundamento mismo de todos nuestros pensamientos. - Dejando nuestro sueño en manos de nuestro doble, es como encontramos o recobramos un equilibrio corporal y, sobre todo, y a su vez, planetario. Aquél que se mantiene en contacto con su doble, no teme al futuro, cosecha sólo informaciones capaces de crear y de recibir las mejores posibilidades futuras individuales. Equilibrándose de esta manera, equilibrará al planeta cuyo futuro potencial colectivo mejorará poco a poco. Sólo nuestro doble es capaz de volvernos a dar las ideas que eran las nuestras cuando nacimos.

- Es importante ser conscientes de nuestro último pensamiento antes de quedarnos dormidos, pues es el que nos dirige al tiempo ralentizado de nuestro doble. Es el agua de nuestro cuerpo la que almacena y restituye las informaciones. El enfocarnos demasiado en nuestros problemas atrae las energías futuras responsables de nuestras dificultades. Si intentamos encontrar nuestras soluciones de esa manera, atraeremos futuros que pueden no ser los más adecuados. Sin embargo, si pedimos a nuestro doble que resuelva nuestros problemas y clasifique las soluciones, lo atraeremos hacia nosotros y nuestros sueños serán benéficos siempre que aceptemos su solución, con una confianza absoluta, con gratitud y en la certeza de que es el mejor futuro posible. La mejor manera de quedarnos dormidos es pedir a nuestro doble que nos envíe el mejor futuro que hemos podido crear. “Que se haga tu voluntad”. El dejar nuestro lugar de director de orquesta a nuestro doble nos adormece más rápidamente que nuestros deseos o proyectos. Simplificándolo en una sola palabra, sería “encomendarnos”. - Nuestra encarnación en la tierra tiene como objetivo permitir a nuestro “doble” arreglar los futuros que hemos perturbado. Le servimos de trampolín hacia el futuro que deberíamos construir según sus consejos.

De esta manera el Apocalipsis volvería a encontrar su sentido etimológico de descubrimiento maravilloso de lo escondido. El planeta sólo actualizaría futuros beneficiosos para todos. - Y recuerda, esto es fundamental: “No pienses en hacer al prójimo lo que no quisieras que él pensara en hacerte a ti”. Es la única manera de que todos nuestros futuros potenciales sean beneficiosos para todos.

 http://tu.tv/videos/jean-pierre-garnier-malet-el-desdoblam

 En lo tocante a la ciencia, la autoridad de un millar no es superior al humilde razonamiento de una sola persona. Galileo Galilei (1564-1642) Físico y astrónomo italiano.

Energia - chakras

Energia - chakras

“La energía fluye en nuestro cuerpo como un río”. “Cuando usted experimenta -por ejemplo- dolor en su abdomen, es más probable, que el flujo de energía se haya debilitado o bloqueado. Sus pensamientos negativos y emociones sobre su problema causa que los músculos de su cuerpo se tense y haya una ruptura en el flujo de energía a esa área.”

 “No somos sólo un ser físico compuesto de moléculas sólidas que trabajan como un reloj. Nuestro cuerpo también tiene un campo de energía.”

 “Nuestro cuerpo parece ser sólido, pero si nosotros pudiéramos magnificar las células, las moléculas, y átomos de los cuales estamos hecho, veríamos en ese  nivel más básico que somos hecho de energía; actividad electroquímica y electromagnética que está en constantemente movimiento y cambio hacia dentro  y fuera de nuestro cuerpo”

 El sistema que rodea e infunde nuestra forma física ha sido conocido por miles de años por sanadores tradicionales y maestros espirituales

 Contamos con un conocimiento intelectual del antiguo sistema de chakras. Porque se piensa que el sistema de chakras encauza las energías arquetípicas, y que podemos  usarlo para encontrar implicaciones simbólicas de los síntomas que el paciente está presentando. Por ejemplo, Los síntomas de Mary (dolor en su abdomen) se localizaron en el tercer chakra que, entre otras cosas, representa el poder personal, ella estaba quejándose de una gran tensión (estrés) en su lugar de trabajo del cual  no tenía ningún mando, sus síntomas representan simbólicamente una falta de poder personal.

 Los chakras son centros de energía que forman la red coordinadora de nuestro complicado sistema mente-cuerpo. Los chakras son centenares de puntos de energía enfocados a lo largo del cuerpo. Todas nuestras acciones y comprensiones parten de estos puntos múltiples dentro de nosotros. Lleno de información arquetípica, forman eslabones entre la mente-cuerpo, espíritu-materia, pasado- futuro, y la energía del cosmos.

 Neurológicamente, nuestro cerebro percibe un cuerpo exterior denso, así nosotros también podemos entrar en un estado meditativo y ve imágenes internas, incluso un cuerpo de energía. Por ejemplo, cuando yo medito sobre mis chakras, las veo como mándalas de energías en colores, dinámicas y en constantemente movimiento.

Teóricamente, un reino transcendente, arquetípico de la realidad existe, y ambos el mundo de la materia y el mundo del pensamiento son determinados por este campo de energía consciente, del cual somos todos partes. Los rituales curativos intencionales forman la fase para preparar nuestra mente consciente para llamar las energías arquetípicas que promueve nuestro bienestar.

 Hace casi un siglo, descubrimientos experimentales fueron hechos en la física que empezaron causando un cambio en la manera como pensamos sobre nuestro mundo. Einstein afirmó que esa energía reside a lo sumo en el nivel más fundamental de la existencia y que esa materia y energía son aspectos intercambiables de la misma realidad, y por consiguiente la materia es esencialmente energía congelada a tiempo. En una manera, la energía es materia que espera volverse realidad física. Lo entiendo, todo en nuestra realidad "material" es energía.

 La conciencia, un campo de energía quántica, es el cimiento fundamental de nuestra existencia, y no la materia como previamente pensamos. La sincronicidad nos muestra que el mundo actúa como una mente cósmica que responde a nuestra conciencia.

Los psicólogos de la energía asumen que el pensamiento existe en el campo de la conciencia, las emociones están arraigadas en las configuraciones de la energía, y los fenómenos psicológicos existen en forma de campo de energía, los cambios psicológicos puede ser una cuestión de alterar el campo de energía personal.

 No tenemos que saber todo para asistir al paciente hacia este tipo de cambio en la conciencia. Junto con este cambio, llegan muchas visiones que son beneficiosos para que la  sanación psicológica ocurra.